Marguerite Yourcenar
Marguerite Yourcenar (Marguerite Cleenewerck, 1903 – 1987), una de las grandes escritoras del pasado siglo, autora de magistrales joyas como Fuegos o el extraordinario Memorias de Adriano.
“Entre la muerte y nosotros no hay, en ocasiones, sino la densidad de un único ser. Una vez desaparecido ese ser, ya no queda más que la muerte…” (Fuegos)
Relacionado
26 abril, 2013 - Posted by Juan | Palabras con luz | Adriano, Citas, frases, Fuego, Literatura, Marguerite Yourcenar
11 comentarios »
Deja una respuesta Cancelar la respuesta
Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.
Un «beRso»
Sé que algún día se alzarán de nuevo las yemas recién nacidas de mi rojo corazón, entonces, quizás, oirás mi voz enceguecedora como el canto de las sirenas; te darás cuenta de la soledad; juntarás mi arcilla, el lodo que te ofrecí, entonces tal vez sabrás cómo pesa el amor endurecido. Gioconda Belli
De los días
«El orden es»
- Acordes en las sendas (2)
- De Texturas Inmediatas (35)
- Los Cuentos del Mar (9)
- Mirando el Mundo (13)
- Palabras con luz (41)
- Poemas del Día Siguiente (6)
- Poesía Extraordinaria (26)
- Suavidades del Alma (15)
-
De mí
-
Únete a otros 278 suscriptores
Del tiempo aquí
- enero 2021
- octubre 2019
- julio 2018
- febrero 2015
- enero 2015
- octubre 2014
- junio 2014
- abril 2014
- diciembre 2013
- noviembre 2013
- octubre 2013
- septiembre 2013
- agosto 2013
- julio 2013
- junio 2013
- mayo 2013
- abril 2013
- marzo 2013
- febrero 2013
- enero 2013
- diciembre 2012
- noviembre 2012
- octubre 2012
- septiembre 2012
- agosto 2012
- julio 2012
- junio 2012
- mayo 2012
- abril 2012
- marzo 2012
- febrero 2012
- enero 2012
- diciembre 2011
- noviembre 2011
- octubre 2011
- septiembre 2011
- agosto 2011
Sendas
Adriano Aire alba alma Amapolas Amor Ana Mª Matute Arte Benedetti caricias Cervantes Charles Baudelaire Citas Color Cuento Célebres distancia dolor Día Siguiente Erich Fromm Esperanza Existencialismo filosofía frases frío Fuego García Lorca García Márquez Genji Gioconda Belli Haiku Hermann Hesse HIM Impresionismo Julia de Burgos Literatura Los niños tontos Luna Luz Lágrimas Mar Marguerite Yourcenar mariposas Mañana Microrelatos Murasaki Shikibu Música Nietzsche Noche Octavio Paz olvido Ortega y Gasset otoño Pablo Neruda Pessoa Pintura Platón Poema Poemas Poesía Razón Relatos Rojo Romanticismo Sartre Silencio soledad Sombra sonrisa Sueños Tagore tiempo tristeza Vicente Huidobro vientoPalabras con Luz
Los Cuentos del Mar
Texturas Inmediatas
Algo para mí
Madrid
De acordes y palabras…
Esa palabra…
De otras sendas
El rincón de la mecedora
“…Y me esperó tanto que todavía está ahí, con su mano levantada, saludándome. En ese tiempo, en ese lugar indefinible donde se guarda lo más profundo y, quizá, lo más inexplicable de la memoria…” Adriana bucea en esa memoria repleta de llaves que abren puertas a las zonas más ocultas, donde todo cabe, incluso el gran vacío. Amor y profunda, arraigada, tristeza, como casi siempre en la delicada y maestra pluma de Ana Mª Matute. Paraíso Inhabitado, un extraordinario paseo a las habitaciones donde se ordena la memoria de nuestra niñez. “El tiempo lo cura todo, pero también lo quema todo. Lo bueno y lo malo. Te arranca de la memoria cosas que quisieras tener ahí. El tiempo se lo lleva”
El mundo, amplio, increíble…
Huellas
- 45.006 hits
Poesía Extraordinaria
Sendas extraordinarias
El juego de los abalorios
El arte de amar
Los niños tontos
El amor en los tiempos del cólera
La náusea
Memorias de Adriano
Señora de rojo sobre fondo gris
La tregua
La soledad de los números primos
Las ciudades invisibles
Fuegos
El elogio de las sombras
El viento de la luna
1984
Cien años de soledad
-
Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 España
Me suena mucho la frase que hay en la imagen, no sé si alguna vez la publicaste y la comentamos, en todo caso bueno leerte, no me cabe duda.
Saludos jefe, allá donde estés.
Es muy probable, mi estimado amigo, Marguerite siempre estará entre esas palabras de mi elección, bien sea por un mucho de amor, bien sea por un algo de odio, tal es mi condición.
Ando por estas nieves, siempre cargado de nieves pareciese… ¡cómo iba a perdérmelas!
Otro abrazo, Jefe.
No te quejes, yo estoy ahí con la comunión de la mayor 🙂
La muerte es parte de la vida, y la vida parte de la muerte. Somos el denominador común en ambas, y … sin embargo.. cuanto hay de vida y de muerte al tiempo.
«Tu amor y mi amor, nuestros cuerpos y el latido,
Serán nuevamente diversa infinidad;
La araña constante extiende su tejido
Y el universo atroz teje la eternidad.» Marguerite Yourcenar
«El amor inmortal corre en la lejanía
de la sangre, y no turbaré con mi elegía,
la cita infinita de la tierra y la muerte»
Sí la muerte es parte del vivir cada día…
Un beso, mi estimada
Quizás solo el humo y la tierra. Aire y suelo, como recordatorio de lo que somos. Y…De vuelta al barro
Y algo más, mi muy estimado… ese ser que cuando decide abandonarnos quema nuestras tierras en su retirada, ese ser que nos deja, invariablemente, vacios.
Algo más entre la muerte y nosotros…
Y quién no sufre una ausencia? los muros y las barreras ante el dolor las ponemos siempre
Cuánto sin leerte?
Saludos Juan!!
¡Cuánto sin que esa rosa perfume estas sendas! Esos muros deben ser la reacción alérgica de nuestra alma vencida.
Un beso, mi estimada
Como no cambias las banderas, no sabemos ya dónde estás.
No la he leído a la Yourcenar. Lo intenté hace tiempo con «Memorias de Adriano», pero creo que no era el momento. Quizá más adelante. La cita es hermosa desde el punto de vista literaria, pero profundamente triste y desesperanzada. El ser, a mi entender, no desaparece con la muerte; es una crisálida que da paso a una bella mariposa.
Un abrazo.
Pocos atienden a mis banderas, y cansa hacer mochila y además cambiar el letrero de la puerta, ya cansa. Pero atenderé tu sugerencia en próximas mochilas.
Memorias de Adriano es un libro extraordinario, el ser humano desnudo en sus miserias y en sus riquezas… un ser humano dibujado, más allá de la realidad de la Historia.
Respecto a las palabras de Yourcenar… serán tristes, tan triste como cuando el ser que se antepone entre un nosotros y la muerte se retira… Todo cambio, toda transformación es dramática, y entre la crisálida y la mariposa hay una muerte cierta, más allá de juzgar el venturoso estado de una crisálida y una mariposa.
Otro beso, mi querida escritora.